Este puede que sea uno de los posts más especiales de esta edición de Sevilla de Boda. Si bien el día B conlleva muchos preparativos y detalles, es cierto que la búsqueda del vestido de novia ideal se lleva la palma, por eso tener una buena guía a mano es fundamental para dar en el clavo.

Guía más o menos ilustrada para encontrar tu vestido de novia ideal

Lo primero que debes saber, y esto es válido para todas las decisiones relacionadas con el evento, es que la boda es tuya y de tu pareja, por lo que a los primeros que hay que complacer es a vosotros mismos. Está bien hacer feliz a los demás, pero ten claro que siempre va a haber alguien que no esté satisfecho, incluso aunque todo sea de ensueño. Esa máxima hay que trasladarla a la caza y captura de tu vestido de novia ideal. Con eso en mente, ¡vamos con la guía!

• La primera anotación nos lleva al primer consejo: con quién ir a buscarlo. Seguro que has visto algún que otro capítulo de Sí, quiero ese vestido y ya sabes que si las novias no van con el séquito adecuado, aquello acaba como el rosario de la aurora. Para evitar dramas del primer mundo, rodéate de personas que vayan a respetar tu criterio y que aporten de forma constructiva a la conversación. Por supuesto, no te lleves a un equipo de fútbol, con 3 o 4 personas como máximo, estaría genial. Si esto último se te hace bola, ve incorporando al resto de amigas o familiares en las siguientes visitas y si alguien es un poco discrepante de entrada, que te acompañe a las pruebas pero no el día de la decisión.
  

  

• Dejando eso claro, tenemos que centrarnos en el cuándo comenzar con la búsqueda. Los plazos van a depender sobre todo de si prefieres un diseño a medida o uno comprado en tienda, es decir, en marcas como Pronovias, Rosa Clará, Victoria, Cherubina, Jesús Peiró… En el primer caso, te recomiendo que tantees a los creadores unos 9 meses antes de la boda, pero probablemente te comentarán que te pases por sus talleres unos 6 meses antes del día B. En cuanto a la segunda opción, normalmente las nuevas colecciones llegan a tienda en noviembre. Ten eso en cuenta para coger tu cita, ya que dependiendo de tu fecha de boda podrás estirar el chicle más o menos. Para ir abriendo boca y comenzar a tomar notas para encontrar tu vestido de novia ideal, te comento que en Barcelona cada año en abril se celebra la Fashion Week nupcial y ahí las grandes firmas presentan sus colecciones de temporada. 
  

  

• Y a razón de lo anterior, tienes que valorar qué opción es la que más encaja contigo. Está claro que las dos alternativas tienen sus pros y contras y todo dependerá de tus necesidades, personalidad y preferencias. Si eres más bien insegura, quizás la opción a medida no sea para ti porque necesites ver el resultado final en el momento, e igualmente si no eres capaz de visualizar la propuesta. Por supuesto, en la otra parte de la balanza va a estar el detalle de que como algo hecho a medida no queda nada o que vas a llevar un diseño único y exclusivo. En lo económico, dependerá de donde vayas, pero hay estudios que pueden estar en precios similares a las marcas. Como ves, aquí hay mucho donde rascar, porque esto es solo la punta del iceberg.
  

  

• Otra cosa que tienes que tener clara cristalina antes de empezar a llamar por teléfono siquiera, es el presupuesto precisamente. Sé que insisto mucho en esto y que puedo parecer aguafiestas, pero es que es muy importante. Debes establecer cuánto puedes invertir en esta partida para así saber a qué atenerte. Imagina que no lo haces, vas a diseñadores o tiendas al azar y cuando te das cuenta te has enamorado de un vestido de 6000 euros y te quieres morir porque 1. No te lo puedes permitir y 2. Sabes que no vas a encontrar otro igual. ¡Recuerda que siempre vale más prevenir que curar!
  
• Como ya te habrás dado cuenta, aquí se apuesta por la coherencia y la lógica, por eso también, a la hora de escoger en tu vestido de novia tienes que tener en mente referencias como el estilo del resto de la boda o el lugar de celebración. No tiene mucho sentido, por ejemplo, llevar un vestido de corte princesa en una boda en la playa o algo superbohemio en una boda muy clásica. 
  

  

• ¿Quién se casa? ¡Pues ya hemos dicho que tú! Por eso deberías saber, al menos, cuál es tu estilo para intentar trasladarlo al día B. En la boda deberías ser tú misma, mantener tu esencia, pero ir un pasito más allá, por eso definir qué sí encaja contigo y qué no, es un buen punto de partida, al margen de que ahí se exploren diferentes opciones. El día de la boda es muy importante no disfrazarse, tienes que reconocerte cuando te mires al espejo.
• Tendencias vs. clásico. Y para esto arranco con un ejemplo muy claro de una boda de este finde: la de la influencer Marta Lozano. Ella lució un diseño de Lorenzo Caprile (uno detrás de otro, pero me centro en el primero) que era de lo más elegante, a medida, le sentada como un guante, atemporal… ¡PEEEEERO, a mí me supo a poco! Una persona con una profesión como la de Marta Lozano y que cuando va a eventos es algo más extra, quizás debería haber arriesgado con algún detalle más moda y quizás pecó de clásica por el miedo al qué dirán y por ello apostó por un acierto seguro, quién sabe. La clave siempre está en ir a por el equilibrio. Por supuesto, lo primero que tienes que buscar en tu vestido de novia ideal es que te identifique. Una vez chequeado eso, puedes incluir de forma sutil y acorde al diseño alguna tendencia que vaya contigo y te favorezca. Esos detalles suelen ser los que marcan la diferencia. 
  
  
• 50 sombras de blanco. Como la moda de Grey ya pasó, llega la del color por excelencia de la novia. Sin embargo, a pesar de que casi siempre las propuestas se reducen al blanco, hay que destacar que los tonos entre los que escoger son de lo más variados, aunque a priori no lo parezca. Además, es muy importante conocer cuál es el que mejor te sienta para verte favorecida. Algunos de los tonos más populares son el blanco puro,  natural, marfil, hielo, beis o champán. Por supuesto, también hay hueco para aquellas que buscan para su vestido de novia algo de color. 
  

Y aquí, después de revisar el pantone nupcial, pongo un punto y seguido a esta publicación, porque la próxima también tratará del vestido de novia, concretamente de los cortes que tienes que tener en mente para saber qué es lo que te sienta mejor. ¡Recuerda que siempre hay más contenido en nuestras redes!